En el Egipto predisnático y en las primeras etapas de su desarrollo histórico, las sacerdotisas acompañadas de eunucos realizaban rituales orgiásticos en honor de la Diosa Madre.
La ceremonia consistía en la la autoestimulación erótica de las sacerdotisas con objetos artísticos de formas fálicas.
También usaban para estos ritos los llamados alabastrones, unas vasijas contenedoras de perfume talladas en alabastro con forma cilíndrica, que simulaban un pene, y base redonda.
Estos objetos, además de servir como consolador ceremonial, se colgaban por sus asas del cuello femenino a modo de talismán.
La ceremonia consistía en la la autoestimulación erótica de las sacerdotisas con objetos artísticos de formas fálicas.
También usaban para estos ritos los llamados alabastrones, unas vasijas contenedoras de perfume talladas en alabastro con forma cilíndrica, que simulaban un pene, y base redonda.
Estos objetos, además de servir como consolador ceremonial, se colgaban por sus asas del cuello femenino a modo de talismán.
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